Si es fumador, lea con atención la información siguiente: su riesgo de morir por cáncer de pulmón, garganta o boca es 14 veces mayor que el de una persona sin esta adicción. Al mismo tiempo, las más de 40 sustancias cancerígenas que se han identificado en el tabaco multiplican por cuatro sus posibilidades de desarrollar tumores en el esófago y por dos en la vejiga. Además, fumar perjudica gravemente al aparato respiratorio, eleva la presión sanguínea e incrementa significativamente el riesgo de desarrollar enfermedad coronaria, enfisema pulmonar y bronquitis crónica. En cambio, si lo deja, la situación se irá progresivamente invirtiendo. Con el tiempo, la larga lista de perjuicios asociados al consumo de tabaco será menor, sus expectativas de vida aumentarán y su salud, en general, mejorará. Doce horas después de consumir el último cigarrillo, los niveles de monóxido de carbono y de nicotina se reducen significativamente. Transcurridos unos días, el ex fumador empieza a notar varios cambios en su cuerpo, el gusto y el olfato mejoran y poco a poco siente que respira mejor. Sin embargo, también tiene un problema principal:
¿Cómo
superar la adicción a la nicotina, similar a la que producen otras drogas? Con
decisión personal y con la aplicación de alguna de las terapias que existen para dejar de fumar.
La primera condición es estar decidido a abandonar el cigarrillo y prepararse personalmente para ello. La Asociación Americana de Medicina (AMA, en sus siglas en inglés) aconseja, por ejemplo, evitar pensamientos sobre lo difícil que va a ser superar la adicción al tabaco o elaborar una lista con las múltiples razones que hay para dejar de fumar y repetirla todas las noches. Asimismo, el proceso de auto convencimiento tiene que ir acompañado de un cambio en el estilo de vida. Para empezar, a la vez que se abandona el tabaco es conveniente comenzar un programa moderado de ejercicio físico, ingerir mucho líquido, descansar suficientes horas al día y evitar las actividades extenuantes.
También es recomendable elegir un día concreto para abandonar el cigarrillo y hacer a alguna persona cómplice de la decisión. Una vez que se han tomado este tipo de medidas, su médico puede asesorarle en la elección de algún método que le ayude a paliar el síndrome de abstinencia y la ansiedad que sufren los ex fumadores.
Para el deseo muy fuerte de fumar, craving (2-4 días hasta meses y años)
·
Respirar profundamente o intentar técnicas de
relajación.
·
Beber agua o zumos.
·
Masticar chicles sin azúcar o comer algo bajo en
calorías.
·
Pensar que este deseo será cada vez menos intenso
y frecuente ayuda a calmarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario